martes, 13 de octubre de 2009

Perforaciones corporales

Cuando salí de la primaria (hace un chingo de años) me hice mi primera perforación en el lóbulo de mi oreja izquierda (como instrumento perforador utilicé un arete de mis hermanitas, me tardé tres días en atravesar la piel pero valió la pena)... por supuesto no me duró mucho y terminé abdicando. Me lo volví a perforar en la época del CCH como a los 16 años y ahí ya me duró un poquito más. Sin embargo un buen día me aburrió y lo eliminé, ahora sólo conservo una pequeña cicatriz.
Punto aparte. Padezco Aicmofobia*. Si es inminente que una aguja va a perforar mi dermis me pongo nervioso, sudo frío y hasta me mareo, no sé en qué momento de mi crecimiento desarrollé ese miedo.
Segundo punto aparte. Quiero hacerme una perforación pero en un lugar original (¿qué es original?, me caga ese término), bien, ¿qué opciones tengo?: el pene, escroto, un pezón (o los dos), tobillos, nuca y todos los comunes de la cara. Ahora sólo falta quitarme mi miedo y me cae que me perforo.

*Mira nomás qué buen uso tengo del idioma español ¿ehh?, ¿no te da envidia? Jaja. En fin, si aún no sabes qué significa Aicmofobia te lo digo: es el miedo a las agujas o a los objetos punzantes, también es conocida como Belonefobia. Hoy ya eres más sabio homo.

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